Hace unos días me encontré con un amigo, y me comentó que estaba pasando por una situación financiera bastante comprometida.

Desde hacía algunos meses sus ingresos se estaban yendo al pago de deudas, y cada vez eran más grandes.

Este amigo mío había adquirido un automóvil (un carro), hace algún tiempo atrás, pagando parte del mismo con un dinero que le prestó otro amigo.

Ellos acordaron que mes a mes, durante 2 años, mi amigo le iba a devolver su dinero, con una tasa de interés muy pequeña; lo que le servía ya que los bancos le cobraban una tasa muy alta.

A su vez, mi amigo utilizaba su tarjeta de crédito todos los meses para pagar sus compras, con diferentes planes de cuotas.

Las tarjetas de crédito pueden ser un problema si las usamos en exceso, además comprometen nuestros ingresos futuros por cosas que queremos adquirir hoy (aquí hablo de cómo usarlas correctamente).

Otro problema que surge con las tarjetas de crédito, es que si no se paga el total de la deuda, presentan nos cobran un interés MUY alto, que día a día va haciendo que lo que debamos sea cada vez más (comienza a formarse el «carrusel» de las deudas).

Mi amigo, cuando adquirió su automóvil, con el ingreso que provenía de su trabajo (que era lo único que tenía), podía pagar las deudas del préstamo por su auto y la tarjeta de crédito.

Los problemas llegaron cuando le surgió un gasto imprevisto. Para pagar ese gasto inesperado utilizó el dinero de su ingreso, y con lo que le sobró,  pagó el préstamo del automóvil a su amigo (primer error).

Al no poder pagar la deuda de la tarjeta de crédito, llegaron los problemas al mes siguiente. Por los intereses acumulados, la deuda que tenía con la empresa de crédito, ya era un 50% mayor.

Ese mes mi amigo decidió pagar los gastos de la tarjeta, dejando de lado la deuda que tenía anterior seguir creciendo, y pagarle al amigo por el préstamo del automóvil (segundo error).

Al tercer mes la situación se volvió insostenible. La deuda con la tarjeta de crédito había crecido de gran manera, por lo que decidió pagar solamente el costo mínimo de la tarjeta de crédito de ese mes (tercer error), y el préstamo automotor.

Para solucionar el problema tuvo que refinanciar su deuda con la empresa de crédito, y pedirle a un familiar prestado dinero para cancelar el monto de la deuda. Además de conseguir un nuevo empleo, ya que con uno solo la situación no era sostenible.

Al analizar la situación de mi amigo llegué a algunas enseñanzas que me gustaría compartirte:

1.  La importancia de un fondo de emergencia:

   Cuando le surgió el imprevisto, si hubiera tenido y utilizado el fondo de emergencia, los problemas de deuda con la tarjeta de crédito no hubieran existido.

   Si quieres leer más sobre el fondo de emergencia ingresa aquí.

2. La importancia de la educación financiera y el hacer un análisis de las diferentes deudas:

   El protagonista de la historia tenía una deuda con su amigo por el automóvil que se compró.

   Esta deuda tenía intereses que eran mucho más bajos que los que generados por no pagar la tarjeta de crédito a tiempo.

   Con un poco de educación financiera pudo tener presente que si no se paga a tiempo y el total de la deuda de una tarjeta de crédito, el dinero que se debe por los intereses son cada vez más grandes.

3. No utilizar la tarjeta de crédito en exceso:

   Las tarjetas de crédito pueden ayudarnos en algunos momentos de urgencia financiera, o cuando se debe comprar algo y no tenemos el dinero para hacerlo, pero ese algo es realmente importante.

   No debemos vivir utilizando la tarjeta de crédito, ni hacer todas las compras en cuotas, porque comprometemos nuestros ingresos futuros, por compras que queremos hacer hoy (muchas son compulsivas).

4. Cancelar las deudas más importantes primero:

   Si hubiera analizado cuál es la deuda que genera más problemas si no es pagada a tiempo, sin dudas elegiría pagar primero la tarjeta de crédito, en lugar de a su amigo.

   Considero que su amigo entendería la situación si se la planteaba, y llegarían a una solución.

   Como medida extrema ante estos problemas, una forma de solucionar sería recurrir a un banco. Solicitando un préstamo que le permita cancelar la deuda de la tarjeta de crédito, con un plazo de tiempo largo, pondría fin al problema del crecimiento de la deuda.

   Por más que asuma una nueva deuda (que también tiene intereses) sería «fija», en lugar de la que tenía con la empresa de la tarjeta de crédito, que crecía día a día.

5. La importancia de tener más de un ingreso:

   Mi amigo para poder cancelar la deuda con su familiar tuvo que conseguir un nuevo empleo, con ello dejó de lado su tiempo libre para poder pagar su deuda.

   No fue malo lo que hizo, pero si tuviera otro ingreso adicional, no hubiera tenido que intercambiar parte del tiempo que le dedica a su familia, amigos, descanso, diversión, al trabajo.

Compartilo en Facebook

Compartilo en Twitter

Compartilo por Correo